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Nuevo Amanecer

Cómo Eliges a tu Mamá Antes de Venir al Mundo

Tus Decisiones Antes de la Encarnación

Antes de que tú —el Alma— encarnes en el planeta,existes como conciencia en algún otro reino; estás viviendo otra existencia. Pero, por la razón que sea, llega el momento de que encarnes en el plano físico.

Ten presente que la naturaleza del Alma es experimentar todos los niveles y condiciones de Dios. Por lo tanto, la experiencia en la Tierra es parte de la evolución del Alma hacia una conciencia mayor de Dios.

Antes de que encarnes o te incorpores nuevamente, tú (como Alma) te reúnes con el ser superior y el Concejo Kármico, que son consejeros o maestros kármicos que tienen acceso a los Registros Akásicos, donde se registra todo lo que tú (el Alma) has hecho.

El grupo se reúne para planificar tu vida en el planeta con un amplio margen de posibilidades y probabilidades.

En esta etapa de la planificación defines aspectos como tus padres, los talentos y habilidades que tendrás, los desafíos y situaciones que necesitas enfrentar, y así sucesivamente. Eliges aquello que tú y los consejeros kármicos deciden que será lo mejor para que avances en tu evolución espiritual. Y ésa es una clave importante para comprender esta vida: tú lo eliges todo.

También preparas las situaciones que te permitirán reunirte con personas con quienes establecerás una relación que te dará la oportunidad de cumplir con deudas kármicas de tus existencias pasadas. Entonces, se elije a un ser básico adecuado al cumplimiento de dicho patrón.

Generalmente, a menos que estés en un plan “acelerado”, todo esto se hace muchos años antes de tu encarnación. Es interesante que muchos de los jóvenes que pertenecieron al movimiento “hippie” en la década del sesenta hayan peleado en la Segunda Guerra Mundial.

Quedaron muy resentidos contra esa guerra y estaban dispuestos a ir a la guerra de nuevo. Ellos eran capaces de darte detalles sobre la guerra y sus horrores por estar fresca en su memoria Consciente.

Concepción, Gestación y Nacimiento

En el lapso de veinticuatro horas a partir de la concepción, el ser básico entrará y empezará a construir el cuerpo del niño dentro del útero de la madre, juntando la esencia de los cromosomas con la conformación genética. Aunque parezcan ser elecciones al azar, en realidad no lo son; se hacen por medio de la esencia espiritual.

Los cromosomas se juntan de manera correcta, de acuerdo con todos los rasgos kármicos: físicos, mentales, emocionales, espirituales, sexuales, financieros, y así sucesivamente. Todo se define en ese momento.

Durante la gestación, en el primer o segundo mes de embarazo, aunque más probablemente sea alrededor del séptimo mes, el Alma, el ser superior y el ser consciente rondarán a la madre, quien puede sentir la presencia de esos seres. Sin embargo, durante este tiempo, el ser básico tiene jurisdicción total sobre el cuerpo del feto. Puede llegar inclusive a causar un aborto espontáneo si se siente incompatible.

Por ejemplo, si los padres crean alguna condición de último momento (en especial, la madre) que altera el plan original. Y si el ser básico debe tener la experiencia de la gestación únicamente, el bebé puede nacer muerto.

En el momento en que el cuerpo hace su aparición en el mundo, el Alma lo respira y entonces el Alma y el ser consciente ingresan al cuerpo. El primer aliento de vida se impregna con lo que llamamos el Alma. Ésta es la chispa divina que ingresa en esta imagen temporal en la que vamos a andar. Generalmente en ese momento, el ser superior se ancla cerca, quedando suspendido cerca del cuerpo.

El Alma normalmente entra en el cuerpo al momento del nacimiento, aunque a veces lo hace sólo parcialmente y se mantiene suspendida cerca de él. En algunos casos, puede que no ingrese en el cuerpo hasta que no tiene seis o siete años de edad.

Pero estará cerca, mientras el ser básico se mantiene a cargo de las cosas del cuerpo, haciendo todo aquello que es necesario.

Libre Albedrío y Libre Elección

Puedes decir: “Está bien; no tengo otra opción, ¿verdad?”. Antes de la encarnación tienes libre albedrío y lo ejercitas; después de encarnar, tienes libre elección. Antes de encarnar, tuviste la libertad para determinar muchas alternativas; después de encarnar, eliges dentro de esas alternativas la que deseas seguir.

Has determinado todas las alternativas posibles antes de llegar aquí y después las desarrollas. Conforme avanzas, descubres qué camino tomar. Pero si te desvías del camino, tienes muchas otras opciones. Antes de encarnar, también previste todas estas otras opciones.

Es tan complejo y complicado establecer todas las variables que puedes incluir en tu vida, que probablemente sería infructuoso usar una computadora para hacer la tarea de los maestros del Concejo Kármico, quienes saben lo ocurrido en todas tus existencias, hasta el detalle más mínimo. Ellos se reúnen contigo y luego con las Almas de tus posibles padres y familiares; y estos patrones de existencia se van resolviendo a lo largo de muchas generaciones.

A continuación un ejemplo de cómo podría desarrollarse: dentro de tu patrón kármico, puede que los consejeros planifiquen escenarios en los cuales trabajarás con el patrón de la paciencia. En una situación anterior es posible que hayas sido muy impaciente con las personas y que las hayas interrumpido, probablemente cortándoles la cabeza.

Por haber creado estas acciones, vas a tener que vivir situaciones en las que no necesariamente pierdas la cabeza físicamente, pero experimentarás la impaciencia y “perderás la cabeza” de otras maneras, quizás a través de las emociones o el temperamento. La acción puede ser simbólica en lugar de física. Te encontrarás en dichas situaciones para aprender a ser paciente.

La situación se puede establecer de manera que la persona que desencadene este patrón de impaciencia en ti, sea alguien que en una vida anterior haya sido el receptor de tu acción. Como ejemplo, quizás esta vez él sea tu padre. Antes de volver a nacer en un cuerpo, estarás de acuerdo con la acción y las condiciones que la rodean, porque es justo que él tenga la oportunidad de equilibrar esa acción.

En situaciones de este tipo, es posible que cuando el niño encarne, el padre vea al niño y le detone un recuerdo de una vida pasada (no a nivel consciente, por lo general) y que mate al niño. Esto ha sucedido, pero normalmente no ocurre porque el padre suele darle al niño la oportunidad de cumplir con la acción y equilibrarla.

Estas situaciones son tan perfectas. Si alguna vez haces algo que perjudica a otra persona y juegas el jueguito mental de decir: “Total, nadie lo sabe. Puedo salirme con la mía”, piénsalo dos veces. No te escapas de nada. El Alma lo registra todo y asume la responsabilidad de todo con perfección, justicia y gran amor.

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