Siempre supe que la espiritualidad era lo que más me gustaba en la vida. Llegué al Movimiento del Sendero Interno del Alma después de participar en los Seminarios Insight I, 2 y 3, los cuales partieron mi vida en dos: antes y después de estos seminarios. Se despertó en mí el corazón espiritual y el corazón amoroso. Ahora soy más consciente de la chispa Divina que reside en mí. Ahora creo, provoco y permito todo lo que quiero en mi vida.
Después de Insight comencé a asistir a las charlas, conferencias, meditaciones y seminarios, de mi maestro espiritual John Roger, y conocí seres maravillosos llamados facilitadores, que me compartieron sus experiencias, vivencias, conocimientos y su amorosidad, para apoyarme en mi crecimiento y despertar espiritual. 
La toma de conciencia y el deseo de aprender y crecer me motivaron a ser un estudiante con aspiraciones de obtener la iniciación en los diferentes planos, hasta alcanzar el plano del alma. Luego llegó el ministerio y la oportunidad de facilitar talleres para mi comunidad.
Uno de los momentos más emotivos que viví recientemente en el movimiento fue durante mi primera participación en la convención del MSIA en el mes de julio de 2015, en Los Ángeles California, donde conocí cientos de personas que buscaban la trascendencia del alma, según los lineamientos de los amados viajeros.
Estuve hospedado en Prana. Sentí la presencia de los amados viajeros. La camaradería, la alegría y la paz que compartimos durante esos días, me sirvieron para reafirmar que se puede vivir el cielo en la tierra. Que el MSIA es mi fuente espiritual y que mis hermanos me apoyan y me aman con la misma fraternidad que yo a ellos.
Doy gracias a Dios por este amor a primera vista.
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