Por: Jorge Augusto Villa Yepes
Este 2015 fue un año maravilloso para mi crecimiento personal y mi espiritualidad práctica. Desde que comenzó el año me entregué a la Divina Providencia y fui dejando que Dios guiara mis pasos y me mostrara lo que era mejor para mi vida. Y de verdad que todo se alineó de manera maravillosa. Yo hice mi diez por ciento, y creo que a veces hasta menos, y le dejé los asuntos grandes a Dios, y de verdad que se fue encargando de todo.
Algunos dirán que eso es parte del fluir de la vida. Que con fe y confianza se logra todo, sin embargo creo que el libre albedrío que nos regala el Señor nos hace entablar permanentes relaciones con el ego y con la intuición. Ambas si se dejan en manos de la Divinidad, nos permiten tener sensaciones corporales que unidas a la apertura del corazón espiritual, nos impulsan a tomar las mejores decisiones.
En el año permití que mis sensaciones y sentimientos incrementaran esa sensación positiva de hacer las cosas bien… deje encender ese fuego ardiente en mi pecho que me mostraba a Dios y que se expresaba en el canto permanente del tono y de la Luz que me envolvía a mí y a todo lo que se relacionaba conmigo. Ello mostraba que siempre estaba alineado con el espíritu.
Conocer Prana, que era uno de mis sueños, e ir al Seminario del Cristo, durante la reunión anual del MSIA, en los Ángeles California, y compartir con tantos seres maravillosos de todo el mundo, incluso sin entender su idioma físico, pero si hermanados de corazón, me abrió un panorama espectacular y una toma de conciencia de que estoy en el camino correcto y con la familia espiritual que siempre busque.
Por todo lo anterior, y porque elijo vivir en los sagrados pensamientos de Dios, en estos momentos de cierre de año y apertura de uno nuevo, sigo en estado de gratitud conmigo mismo, con las enseñanzas de J-R y con la maravillosa guía espiritual de John Morton, quien cada vez me llega más, por su capacidad de entendimiento, su transmisión de un mensaje sencillo de amor y su neutralidad, aunada al de su equipo de apoyo.
En el 2016 me propongo ser más disciplinado como alumno y como humilde maestro; más consciente de mi potencial como ministro, y prestar más servicio, expandiendo mi luz y mi amor, para que con mi ejemplo otros sepan que el Movimiento Del Sendero Interno del Alma es la mejo alternativa para Vivir en los sagrados pensamientos de Dios
Baruch Bashan