Traducción de Saúl Monard
Pregunta:¿Cómo puedo ayudar a limpiar nuestro planeta?

Respuesta: Todos podemos hacer nuestra parte para ayudar a nuestro planeta. Podemos contribuir local y globalmente, de manera personal y colectivamente. Lo importante es ser más consciente y estar dispuesto a serlo. Y lo que importa aún más es contribuir de una manera que demuestre tu amor y cariño, que es la energía transformativa más grande en la tierra. Mientras más demostremos nuestro amor y cariño, mayor sanación y transformación tendrá lugar, para nosotros y nuestro planeta como un todo.

Limpiar nuestro planeta significa que cada uno de nosotros practique aquello que conduzca a una vida más limpia y saludable. Comienza con uno y después nos envuelve a todos juntos. No creo que ninguno de nosotros realmente tenga el poder de cambiar la naturaleza de nuestro mundo. Sin embargo, tenemos el poder y la autoridad de cambiar cómo nos relacionamos personalmente con el mundo. Así que decide que rol quieres tener. Quiero decir con respecto de hacer tu 10% — la parte que es tu responsabilidad personal en este mundo mientras que el resto está con Dios. Todo comienza con cuidarte a ti mismo, lo qué a su vez conduce de manera natural a ayudar a cuidar a otros y a nuestro planeta.

En el MSIA, enseñamos la Trascendencia del Alma, acerca de cómo despertar al alma mientras se vive en el mundo. Despertar a nuestra alma se refiere a aumentar nuestra conciencia del 90%, de nuestro aspecto espiritual que sabe que somos uno con Dios. En el MSIA, nos preguntamos, «¿Cuál es el propósito de mi alma en este mundo?, ¿Para qué estoy aquí?» Despertamos a las respuestas cuando aceptamos que todo se nos proporciona para nuestro mayor bien y el bien de todos nosotros colectivamente. Despertamos a nuestra alma cuando cooperamos con lo que es, a través de nuestro amor y afecto, sin importar cualquier condición negativa en el mundo.

Así que mejora tu postura con respecto a cómo eres uno con Dios. Siempre estarás en lo correcto cuando recuerdes que eres amado, venerado y siempre estás protegido. Esa es la manera en la que estás con Dios, por que Dios ama a toda su creación. Cuando recuerdo esa verdad, experimento paz y relajación.
Estoy tranquilo conmigo mismo. No tengo segundas intenciones, porque con Dios todas las cosas son buenas. Es más, con Dios todas las cosas son posibles. Una vez que conozco esa verdad, puedo elegir cómo hacer mi parte, mi 10% de la mejor manera posible, para ayudar en la sanación y la transformación de nuestro planeta. Primero y sobre todo lo hago a través de mi amor y cariño por toda la creación de Dios.

Aunque el mundo tenga limitaciones, en la Trascendencia del Alma sabemos que por dentro siempre esta ocurriendo algo mayor. Cuando se nos presenta un mundo limitado, aún podemos conocer el gozo interno a medida que despertamos a nuestra alma. Así que haz lo mejor que puedas con tu 10%. Sácale provecho a lo que viniste hacer personalmente en este mundo. Cuida de ti. Luego a medida que ayudas a cuidar de los demás, a través de tu amor y tu cariño, tendrás la experiencia del gozo de tu alma haciendo tu parte para ayudar a limpiar y sanar nuestro planeta.