En este ejercicio, el punto focal o ancla de tu atención es tu respiración. Cuando te enfocas en tu respiración, mantienes la conciencia en este nivel físico, mientras vas entrando en un estado de relajación profunda y recorres los planos interiores.

Puedes hacer esta meditación de la respiración en cualquier lugar y casi en cualquier momento. Es particularmente efectiva si estás en situaciones en las que experimentas estrés o ansiedad. La meditación de la respiración te calma y te brinda control y dirección personales que son muy beneficiosos.

«Encuentra la armonía. La vida es tan simple como inhalar y exhalar. Una vez que has encontrado ese ritmo, puedes seguir en él. Si puedes lograr esa disciplina y mantenerla, comenzarás a superar todo este mundo físico.»  John-Roger, DCE

  • 1
    Pide la Luz para Ti

    Para hacer esta meditación de la respiración, siéntate cómodamente y cierra tus ojos, pide ser rodeado, protegido y lleno con la Luz para el bien mayor, mientras te enfocas en como entra y sale tu respiración. Este es tu punto de referencia, tu punto focal.

  • 2
    Enfócate en Tu Respiración

    Puedes observar tu respiración en el chakra del estómago, la nariz, la garganta, la boca – adonde sientas tu propia respiración. Tal vez ni te enfoques en una parte específica de tu cuerpo. Tal vez simplemente te sientas y estás conciente de tu respiración. No es necesario que pienses en nada.

    Podría resultarte útil inhalar por tu nariz y exhalar por tu boca.

  • 3
    Si Te Encuentras con un Bloqueo...

    Si descubres que hay un Bloqueo en el fluír de tu energía que parece no liberarse, continúa conentrándote en tu respiración. Que siga siendo tu punto de referencia.

  • 4
    Mantén tu Atención en Tu Respiración

    Podría ser que empieces a escuchar sonidos en tu conciencia. No permitas que eso te distraiga o te fastidie. Mantén tu atención en tu respiración. Es posible que empieces a agitarte dentro de ti y en esos momentos, vuelves a estar totalmente presente en el mundo físico. Cuando algo así sucede, es fácil sentir que no estás llegando a nada; no permitas que esto te detenga. Vuelve a enfocarte en tu respiración.

  • 5
    Sigue Enfocado en Tu Respiración

    Si al hacer este ejercicio, empiezas a soñar o a enfocarte en imágenes, has perdido la noción de enfocarte en tu respiración. Cuando las tensiones acumuladas y los bloqueos condicionados empiezan a soltarse, podrías experimentar algunas cosas extrañas.

    La liberación puede causar imágenes inusuales, pasando por tu conciencia. No es necesario reaccionar. Sigue enfocándote en tu respiración.

    Tal vez te parezca que tu cabeza se vuelve más y más liviana, como si te estuviesen elevando. Es tu conciencia que se expande.

    Tal vez sea como hamacarte hacia adelante y atrás con la energía de la Luz presente. No intentes detenerlo.

    Tu tarea es muy simple. Sigue enfocándote en tu respiración.

  • 6
    Usa Tu Respiración como Tu Punto de Referencia

    Vieres lo que vieses, ante cualquier sensación, la idea es que mantengas tu respiración estable y la uses como tu punto de concentración, que se mantiene constante mientras las otras cosas cambian.

    Estás usando la familiaridad de tu respiración como punto de referencia mientras viajas hacia tus mundos interiores.

    Te sorprenderás ante la paz y la calma que pueden resultar de este ejercicio.