Este trabajo intracesorio puede considerarse como una “siembra interna”
Este artículo de John-Roger se publicó por primera vez en el New Day Herald en agosto de 2002. Es un recordatorio oportuno de cómo podemos contribuir a la paz dentro de nosotros mismos y en el mundo.
Lo que no estamos haciendo es trabajo “intercesor”. Esto es cuando, digamos que tu estás teniendo un desacuerdo con alguien, como tu cónyuge o un compañero de trabajo, y alguien intercede en nombre de ambos y media entre ustedes para aclarar las cosas.
Acá estamos haciendo trabajo “interno”, donde vamos dentro de nosotros mismos, donde todo existe, incluso si está afuera en el mundo. Allí dentro encontramos la Divinidad de nuestra naturaleza. Y entonces, aquellas cosas que nos perturban, o a cualquier persona, o situación en el mundo que hemos juzgado o que nos ha desequilibrado la traemos dentro de esa naturaleza Divina. Y esta situación o persona fluye adentro y hacia afuera, en su totalidad, y en ese proceso recibe una bendición de la Divinidad que entra en la conciencia de Dios.
Lo bueno es que, si la perturbación está dentro de nosotros mismos, es reclamada nuevamente hacia la unidad. Si la perturbación está fuera de nosotros, entonces la bendición fluye a través de nosotros y sale de nosotros hacia ello.
Es importante tener en cuenta que es el Espíritu quien lo hace; nosotros simplemente lo estamos configurando, participando y fluyendo con él. Pero lo que realmente sucede está fuera de nuestras manos y está en manos del Espíritu.
Este trabajo intracesorio puede considerarse como una “siembra interna”. Es una manera para que tú y los demás tengan más equilibrio y elevación. Al igual que la siembra, hay un pago que será necesario extraer. En este caso, a menudo pagamos por ello con parte de nuestra conciencia: estamos dispuestos a decir: «Renuncio a una parte de mi conciencia por tu bienestar».
Luego siembras para que te sea devuelta tu propia consciencia, que sería la devoción a tus ejercicios espirituales.
Otra forma de recuperar esa parte de la conciencia, sería haciendo buenas obras, amando y apoyando a las personas que están a tu lado. Podría ser tu esposa, compañera de cuarto o compañero de trabajo. En este método, la gente quiere saber que estás con ellos, por lo que es importante que lo demuestres y no solo se lo digas de los labios para afuera; de lo contrario, puedes perder parte del trabajo intracesorio que realizaste.
– John-Roger
