He escuchado a John Morton compartir acerca de cómo estamos aprendiendo y de esa manera nos volvemos la relación perfecta dentro de nosotros mismos. John resaltó cómo podemos experimentar la relación perfecta en un instante, apenas un breve momento, quizás en menos de un segundo, y en el cual estamos felices ó estáticos. Ese momento puede ser en silencio cuando experimentamos un profundo conocimiento ó nos damos cuenta de que es perfecto. Leigh preguntó a John acerca de la Fe y la relación perfecta.
Me sentí tranquila cuando explicó que aunque podemos tener dudas y temores, esos pensamientos y sentimientos no son quienes somos. Siempre somos amados por Dios. Estamos siempre en relación perfecta con el Señor.

John contestó las preguntas del público presente y de quienes estábamos conectados vía trasmisión de Internet. John nos recordó que la perfección está siempre presente. Posteriormente nos animó a observar cuán dispuestos estamos con la intención de obtener un mayor conocimiento de la perfección y de la relación perfecta interna. John nos recordó que fuimos hechos en las cualidades de Dios, a imagen y semejanza de Dios, y que a veces la experiencia humana puede parecer corta. Por ello, cuando somos llamados a mirar en el Espíritu recordemos que todo está en perfecto orden, todo el tiempo. Entonces podremos relajarnos y ser pacientes, tal y como lo expresa John soltarlo y dejárselo a Dios.

En respuesta a la preocupación por los recientes terremotos ocurridos en Haití y Chile, John nos recordó que en todo momento nuestro planeta ha experimentado problemas similares. Leigh destacó cómo el mundo está respondiendo con gran compasión y cuidado para servir y ayudar a los afectados en todo el mundo. Luego compartieron una cita de John-Roger que John nos leyó, «Si quieres conocer el secreto de la trascendencia del alma, busca lo bueno en las personas y las cosas, y todo lo demás déjaselo a Dios.» Posteriormente John nos recordó cómo, incluso en circunstancias difíciles, estamos llamados a amar y aceptar y buscar el bien, aún cuando nuestra mente no pueda entenderlo. A partir de estos mensajes comprendí que, al buscar el bien, estoy teniendo una experiencia de mi alma — la divina relación perfecta.

De esta trasmisión de Internet, aprendí que la relación perfecta está en nuestro corazón y es una certeza, una verdad adentro de todos nosotros. Estoy agradecida por el ánimo que nos otorgó John para clamar en este momento la relación perfecta con nosotros mismos, incluso si no lo comprendemos ó si tenemos dudas. Aprecio el recordatorio que John hizo de que todos estamos aquí aprendiendo y creciendo como Almas. Por lo tanto podemos esforzarnos por ese amor perfecto, sabiendo que cualquier cosa que comencemos será completada a través del amor y la devoción del Cristo, el Ungido, que reside en todos nosotros.

John culminó la trasmisión por Internet con una bendición perfecta para la Relación Perfecta. Mientras Jean y yo escuchábamos las inspiradoras palabras de John, pude contemplar dentro de mí que la relación perfecta que conozco es mi lugar en el corazón de Dios. En ese conocimiento, me di cuenta de que la relación perfecta está adentro mío y que siempre ha sido así. ¡Gracias a Dios!